¿En el futuro seremos prescindibles? ¿Es cierto que miles de puestos de trabajos desaparecerán? ¿Estamos ante el comienzo del fin de la historia de la humanidad? Estas interrogantes parecen sacadas de una novela distópica, pero… lo cierto es que existe un trasfondo. Con la llegada del primer robot androide (y los nuevos modelos en el mercado) muchas personas empezaron a lanzar teorías de conspiración que han calado en la cultura colectiva. Por eso vale la pena preguntarse qué es un robot androide y por qué pone en alerta a la población.
¿Llegarán para ser nuestros sustitutos? ¿Es por eso que se ha dado un avance vertiginoso en temas como el transhumanismo? Pues, hay mucha información que carece de veracidad. ¡Así que no sigas cayendo en fake news! Con este artículo, entenderás que los robots androides tienen mucho de desarrollo tecnológico, avance en la ciencia y poco de ficción o peligro para los humanos. ¡Deja atrás los prejuicios y continúa leyendo!
Nos fascinan los robots porque son reflejos de nosotros mismos.
Ken Goldberg, investigador estadounidense en el campo de la robótica.
Tabla de contenidos
¿Qué es un robot androide?
Se define como androide a aquellos robots que tienen una apariencia similar a las de los seres humanos. Según el Diccionario de la Real Academia Española (DRAE), la palabra androide significa «autómata de figura de hombre». Además, los androides tienen la capacidad de imitar algunos aspectos de la conducta humana. Estos robots forman parte de la cultura pop, ya que desde hace muchas décadas han sido representados en películas, series, libros y más.
En ese sentido, un robot androide es una máquina autómata antropomorfa que puede ser configurada para realizar acciones humanas. Algunas de ellas pueden ser limpiar, cocinar, practicar algún deporte o conversar. Cada día la tecnología avanza hasta tener robots de esta categoría desarrollados y con una apariencia lo más real posible.
¿Pero todos los robots son androides? No. Esto se debe a que este término solo aplica para aquellos que tienen una apariencia masculina. De esta manera, aquellos robots con apariencia femenina, aunque tienen la misma función, reciben el nombre de ginoides.
Características de los robots androides
- Se desplazan según un sistema de coordenadas que puede ser cartesianas, cilíndricas o polares.
- A mayor dinamismo, mayor autonomía necesita el robot. Por eso es que existe tanto esfuerzo por hacer que imiten la inteligencia humana.
- Los robots androides deben tener cierto grado de libertad para desempeñar las tareas a las que están destinados.
- Tienen que contar con una fuente de energía.
- Poseen gestos propios de las personas e, incluso, sus expresiones y lenguaje no verbal
- A pesar de que están elaborados en metal y otros materiales, logran engañar con su apariencia casi humana; principalmente los robots androides de última generación.
- Pueden actuar acorde al comportamiento o estado emocional de las personas que se encuentran a su alrededor.
- Deben tener tres componentes indispensables: mecánico, eléctrico y de computación o programación.
- Tienen funciones prácticas, no obstante, están destinados fundamentalmente al estudio y experimentación.
Breve historia de los androides
La historia de los androides inicia en 1270 cuando Alberto Magno mencionó este término por primera vez. Sin embargo, no fue hasta 1886 cuando en la novela La Eva del Futuro el autor Auguste Villiers le dio fama a nivel mundial. Las leyendas y mitos sobre un hombre de hierro fabricado por los humanos no es algo nuevo, desde la Grecia Antigua se creía que Hefesto, artesano y herrero de los dioses, llegó a crear a estos seres.
La apariencia de androide es algo que surgió en el mundo occidental, donde desde hace siglos se cree que este tipo de robots son una especie de monstruos que con su desarrollo traerán muerte y destrucción, debido a que se rebelarán contra sus amos o creadores. De allí que el término robot androide despierte tanta suspicacia.
Primeros robots androides…
Ahora bien, el primer robot androide del que se tiene conocimiento se llama Eric, apareció en 1928 durante un evento de la Sociedad de Ingenieros de Modelos. Fue una creación del periodista y veterano de la Primera Guerra Mundial, William Richards, y del ingeniero Alan Reffell.
Lo más sorprendente para la época es que Eric hablaba, no está del todo claro cómo lo hacía, pero los periodistas llegaron a afirmar que Richards había pagado patentes a Guillermo Marconi, ingeniero electrónico, para utilizar algunos de sus sistemas de radiotransmisión. Eric pesaba cerca de media tonelada y, a diferencia de los robots androides de la actualidad, tenía una movilidad bastante restringida.
En 1933 llega su hermano menor, George, a quien se le denominó como uno de los productos científicos más maravillosos del siglo XX. Entre las características de George se encuentra que era capaz de levantar una silla por sí mismo. En los años 50 aparece Elektro, una sensación de dos metros que iba a todas partes en compañía de su perro.
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En la actualidad
Así, la robótica ha avanzado a pasos sorprendentes hasta la actualidad donde los ejemplares de estos robots están a la orden del día. Las series y películas se han encargado de añadirle mucho futurismo, mientras que los científicos trabajan arduamente para imitar al ser humano, de hecho, muchos de estos seres ya están equipados con inteligencia artificial.
Tipos de robots androides
- Robot de servicio: Ayudan a los humanos con actividades domésticas o sirven para atender a los clientes o usuarios en empresas. Un ejemplo de esto es el robot androide de Smart Service Robot, que da la bienvenida y brinda información a clientes de establecimientos comerciales. Tiene la capacidad de participar en un diálogo. Es útil para lugares con mucha afluencia de público como hospitales, aeropuertos u hoteles.
- Robots de medicina: Este tipo de robot androide está en una fase temprana y se quiere que sea de utilidad para los servicios médicos. Aun así, ya está en funcionamiento el androide que ha sido creado por la empresa china iFlytek. Se llama Al, tiene enormes ojos azules y tímida sonrisa, actualmente realiza diagnósticos, pero en compañía de un médico humano.
- Sexuales: ¿Alguna vez has escuchado de los androides dedicados a complacer sexualmente? El más avanzado probablemente sea Henry, el primer robot sexual androide con pene regulable. Este robot tiene un aspecto físico divino, caracterizado por unos abdominales de ensueño, ojos verdes y 1,82 metros de altura. Además, puedes modificar la personalidad de Henry por medio de una app móvil.
- Cobots o robots colaborativos: Los androides podrían ser tus próximos compañeros de trabajo. De hecho, Promobot pretende lanzar próximamente una nueva generación de robots hiperrealistas de nombre Alexei, quien podría trabajar como administrador, conserje, guía o consultor. Además, la robótica industrial será un punto clave en la Industria 4.0.
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Para qué sirve un robot androide
¿Has visto la saga de Star Wars? Seguramente se te venga a la mente C3PO, un prototipo de robot androide cuya función es la de servir. En el mundo de la ficción este es uno de los ejemplos más populares y su utilización no dista mucho de la realidad. Al principio, se creía que estos robots tenían que ser útiles para los humanos, ser un complemento que ayude a realizar las tareas cotidianas.
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Por ello, diversos robots androides están equipados con un complejo sistema que los ayuda a servir a los demás. Puede ser desde realizar tareas de organización hasta ser contratados para actividades como la entrega de platos a los comensales de un restaurante.
Sin embargo, hay otras funciones de este tipo de robot como, por ejemplo, realizar vocaciones basadas en procedimientos o administradores de mostradores de recepción. Por otro lado, sirven para entender mejor el cuerpo humano (se aprende en la medida que se intenta replicarlo en los robots) y la cognición humana (la actual línea de investigación se está enfocando en cómo los humanos aprenden de la información sensorial para adquirir habilidades perceptivas y motoras).
Un robot androide también sirve como entretenimiento para las masas. Lo vimos con el primer robot androide, Eric, quien giró por todo el mundo dando entrevistas y participando en eventos masivos y, ahora, Úrsula, una ginoide que canta, toca música, baila y habla con su público en uno de los parques de Orlando más visitados: el Universal Studios.
Lo que se pretende es que los androides puedan hacer cualquier tarea común para los humanos. La limitante, por ahora, es que requiere de un software bastante complejo y se necesita más avances en campos como el deep learning, la visión artificial, entre otros.
¿Cuál es la diferencia entre androide y humanoide?
Aunque los dos tengan apariencia humana, la principal diferencia entre un androide y un humanoide radica en su condición. Un humanoide solo parece humano, el ideal que se persigue es que sea lo más real posible en cuanto al exterior. Es decir, un humanoide busca ser lo más fiel posible a un humano promedio: dos piernas, dos manos, un rostro simétrico, etcétera.
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No obstante, el androide va un paso más allá. No solo se detiene en el aspecto físico, sino que también se pretende que imite la lógica de los pensamientos de los humanos, puedan mostrar sentimientos o emociones e, incluso, que pueda llegar a entablar una conversación lógica con los humanos.
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Diferencia entre robot androide y cyborg
Un cyborg o cíborg, según la explicación dada por los dos científicos que acuñaron el término, Manfred E. Clynes y Nathan S. Kline, es la unión entre cyber y organism. En ese sentido, es una mezcla que combina elementos mecánicos y orgánicos. Sin embargo, este significado ha sido objeto de controversia porque ¿se puede considerar como cíborg a una persona que use un marcapasos?, ¿o el uso constante de wearables nos convierte en cyborgs?
Ante todo este significado, es evidente que existe una disimilitud entre cyborg y androide. Los androides tienen la particularidad de que son completamente mecánicos y ninguna de sus partes pueden ser consideradas como orgánicas.
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Ejemplos de robots androides
Kebbi, útil para las familias
El androide Kebbi de Taiwan Excellence es el mejor ejemplo de robot androide. Está orientado a las familias y su principal sello distintivo es que es capaz de reconocer el rostro y la voz de los miembros de la familia. Kebbi entiende el lenguaje corporal, cuenta historias, juega, baila y enseña idiomas como el inglés u otras materias. También puede recibir órdenes y ejecutarlas.
Robelf, guardián del hogar
Este es un androide de Robotelf Technologies. Él puede hacer llamadas, informar de las últimas noticias, enseñar o hasta hacer bromas. A menudo es descrito como el guardián del hogar porque su tecnología de reconocimiento facial le permite detectar la presencia de extraños en la vivienda y envía una alerta a los dueños.
Ibuki, niño de 10 años
Ibuki es un robot androide con apariencia de un niño japonés de 10 años. Ishiguro, director del Laboratorio de robótica de la Universidad de Wakayama, aseguró que el propósito de Ibuki es que tenga el comportamiento de un niño humano. Por ahora, es capaz de sonreír y hacer algunos gestos al ver a alguien que ya tiene registrado en su sistema de reconocimiento facial. De momento, puede mover los dedos de la mano con habilidad.
Robot Mindar, sacerdote budista
¿Te imaginas a un robot androide desempeñándose como sacerdote budista y rezando en el templo de Kodaiji? ¡Pues no es una novela, sino que se trata de la realidad! Mindar se halla en Japón rezando contra los males que asolan a la humanidad y advirtiendo a los hombres sobre el peligro del deseo. Fue desarrollado para acercar sus pensamientos a los jóvenes por medio de un dispositivo que provocase su interés.
Sophia, la ginoide más icónica
¿Sabes cuál es el androide más avanzado en la actualidad y qué tareas realiza? Aquí te lo cuento: es Sophia, una ginoide de Hanson Robotics. Está diseñada para aprender y adaptarse al comportamiento humano, puede participar en entrevistas, conferencias y anuncios sin errar en las respuestas.
Sophia es el robot más avanzado, fue diseñada con el objetivo de ser una compañera ideal de ancianos y personas mayores que habitan en residencias, pero sigue en estado de desarrollo, lo que se busca es perfeccionarla tanto como sea posible. Por su parte, utiliza el machine learning para que coincidan sus expresiones faciales y pueda manejar la dicción.
El rostro de Sophia se inspira en Audrey Hepburn y está elaborado en una piel de goma flexible de silicona que la hace muy realista. Por si fuera poco, es la primera ciudadana robot de un país, ya que en el 2017 obtuvo la nacionalidad de Arabia Saudita.
CUE3, basquetbolista olímpico
En el marco de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 (evento realizado en este 2021 por la pandemia de la COVID-19), Toyota presentó CUE3, un robot androide con una efectividad perfecta al jugar baloncesto, que en su demostración metió los tres lanzamientos que ejecutó y desde diferentes posiciones. Este androide está equipado con una cámara, un radar y un sistema de inteligencia artificial y entrenó sus sistemas durante cinco meses. CUE3 tiene una altura de 2,04 metros.
Alex, atención al público
Promobot presentó un robot llamado Alex, sus facciones imitan a las de Alexei Yuzhakov, presidente de la empresa. Este androide reproduce más de 600 variantes de microexpresiones faciales de los humanos y se espera que en los próximos meses empiece a trabajar en un centro multifuncional de servicios gubernamentales y municipales de Rusia. ¿Qué te parece?
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Palabras finales
La llegada de los robots androides no es el apocalipsis, en realidad, aún faltan muchas décadas para perfeccionarlos y, sobre todo, para que haya una producción y demanda masiva. Ya se ha visto con Pepper, el famoso robot de Softbank Robotics, cuya compañía anunció el cese de la creación de estos modelos por falta de demanda.
Pero se debe resaltar que es admirable el esfuerzo que realizan las compañías para llevar todo el tema de la robótica a otro nivel. Como diría David Hanson, creador de los humanoides más realistas del mundo: «Estamos viendo la llegada de robots conversacionales que pueden caminar en nuestro mundo. Es una época dorada de la invención».
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